Autor: Lucky
Si uno indaga acerca de quién era Manuel Lamar Cuervo, la mayoría de las personas no sabría decir. Pero si preguntamos por Lillo, el creador de Matojo, todo cambia y se dibuja una pequeña sonrisa en el rostro de las personas.
Nació el 13 de diciembre de 1929 en Bogotá, Colombia, pero desde joven se instaló en La Habana donde cursaría estudios en Derecho.
Sin embargo, el interés que despertaron en Lillo el periodismo y el dibujo hizo que se dedicara por completo a la creación de historietas y animados. La originalidad y el carisma fueron sello distintivo en su obra y se convertiría en uno de los historietistas más gustados en nuestro país.
Su personaje más popular, Matojo, apareció en los periódicos Pionero, Palante y la revista Zunzún, así como en libros. Posteriormente daría el salto a la televisión desde donde alegraría a generaciones de cubanos con sus ocurrencias, llegando incluso a inmortalizar frases en nuestra memoria como ”un nadador, necesitamos un nadador”.
Lillo fue fundador del departamento de dibujos animados de la Televisión Cubana y también miembro de la UNEAC y la UPEC.
El caricaturista se estableció en Miami en 1992. Allí continuó colaborando esporádicamente en diversas publicaciones. Falleció el 25 de noviembre de 2019 a la edad de 89 años y dejó como legado la sonrisa de varias generaciones.